3 de mayo de 2012

Querido Desconocido

He conocido a alguien, en realidad he conocido a demasiados alguien...y aun así, sigues siendo tú y solamente tú.
Todas esas personas podían tenerme y me tuvieron más o menos entre sus manos, me gustaron, me gustan.
Pero tú...
Fuiste la chispa, el comienzo, el prefacio de todo lo que soy ahora.
Y aunque es cierto que ya no te quiero, te sigo queriendo...
En el recuerdo todo es infinito y recuerdo momentos congelados en el tiempo donde mi amor por ti no tenía límite imaginable.
Recuerdo perfectamente tus ojos color de lo más común, que se abrían para dejarme paso a ti, días amarillos, días marrones, demasiado habituales y comunes, pero eran tuyos, y eso hizo que todos los demás ojos se volviesen vulgares a mi vista.
Recuerdo tu mandíbula cuadrada, ese giro tan pronunciado que podía tenerme horas y horas enganchado.
Recuerdo tu barba, de lejos era negra, pero en los momentos más íntimos y bajo el sol que entraba por la ventana de tu habitación se veía fastidiosamente pelirroja, fastidiosamente tuya.
Recuerdo cómo me hablabas, todas y cada una de tus expresiones, de tus saludos y despedidas, de los de cada día durante todo ese tiempo.
Todo eso esta en mi cabeza, por y para siempre, y me encanta poder recordarte tan perfecto.
Te quiero.

No hay comentarios:

Publicar un comentario